El Departamento de Cine y Espacio Audiovisual (DeCEA) de la Subsecretaría de Cultura del Chaco continúa con el ciclo Esperando a Aniceto. La retrospectiva del genial director argentino Leonardo Favio presenta en esta ocasión Nazareno Cruz y el Lobo (1974).
Esta obra es una de las pocas incursiones del cine argentino en un territorio realmente fantástico. Mezcla de cuento de hadas con cine de terror, esta película recrea el mito del lobizón a través de una puesta en escena excesiva y desbordada. Una campesina pierde a su marido y seis hijos varones casi al mismo tiempo en el que nace un bebé que, por todos los medios, será tratado de alejar del destino trágico que le ha tocado: ser lobizón. Pasan muchos años y Nazareno Cruz (nombre que le fue impuesto con el fin de alejar el diablo) súbitamente se enamora de la dulce y rubia Griselda. Ahí se desencadena la tragedia.Nazareno Cruz y el Lobo es la quinta película de Leonardo Favio, y probablemente la más extrema narrativamente, Nos remite a Bergman y Fellini, y en ella se cruzan Verdi y el radioteatro, los mitos autóctonos y el latín, dando como resultado una obra magistral, la más vista en la historia del cine argentino: más de tres millones de personas en sala.
Este ciclo tiene el objetivo de, además de presentar la obra completa de un realizador ineludible del cine nacional, ser formador de público. Antes de cada proyección se ofrece una introducción teórica en la que se recorren distintos aspectos del film: narración, fotografía, sonido, montaje, referencias, etc. El fin de la misma es aportar nuevos elementos de reflexión y disfrute sobre la película, al mismo tiempo que forma espectadores críticos.
La función es el miércoles 12 de noviembre a las 21 hs en la Sala de Proyecciones del DeCEA, Wilde 40. La misma cuenta con capacidad para 70 personas, sonido Dolby 7.1. y está climatizada.
La función es libre y gratuita. Para más información, acceder a http://www.deceachaco.blogspot.com/ o a decea.chaco@gmail.com
Análisis de Nazareno Cruz y El Lobo
Por Alejandra Muñoz
“Esa película se gestó cuando en el país se desarrollaba esa enorme lucha por saber cuáles eran los buenos, cuáles eran los males. Todos se debatían pensando si el peronismo, si la izquierda, si la derecha... El que elegía el amor estaba perdido. En ese momento eran todas mezquindades. La historia de Nazareno me pareció una buena metáfora. Es una película que parte de mi ingenuidad, de haber pensado que enviando mensajes se iban a poder apaciguar los ánimos.”
Leonardo Favio
Esta película de L F es probablemente la más defenestrada por muchos, pero al mismo tiempo es la que más emociona a todos los públicos. Se convirtió en la más convocante de la historia del cine argentino. Más de tres millones de espectadores en sala.
Es naïf, es desbordada, excesiva, pero también esta llena de delicadeza y de muchísima belleza
El título NAZARENO CRUZ Y EL LOBO, nos habla de ese desdoblamiento. Ese conector Y nos indica que son dos, que nunca van a poder ser uno solo.
El subtitulo es un poco más enigmático: Las palomas y los gritos. Podemos pensar en que son la representación de la inocencia del amor de Nazareno y Griselda, y los gritos, el horror frente a ese lobo preanunciado. De hecho las palomas aparecen cuando se aman los jóvenes, así como también cuando él se entera de su trágico destino.
El lugar en el que se desarrolla la película es indefinido: conviven las montañas, el mar, la pampa. Con el tiempo sucede lo mismo: no tenemos ninguna precisión. Es muy de cuento esto.
Lo primero que vemos es una bruja, que nos remite al comienzo de Macbeth, en la que ellas ofician de narradoras de la historia por venir. La Lechiguana contextualiza al tiempo nos presenta el carácter de la narración: mágico, mítico. Luego conduce la narración una voz en off, que más tarde advertimos que es la del propio Diablo, encarnado por Alfredo Alcón. Este narrador tiene un lenguaje plagado de modismos, que nos remite el lenguaje popular.
En esta película conviven la más pura cursilería de las escenas de amor con la delicadeza de la narración, la alta cultura (encarnada en Verdi, en la cita a Macbeth, el latín, Bergman, etc) se mezcla felizmente con el radioteatro, la mitología local y los cuentos de hadas.
Asimismo, los diálogos son teatrales, muy poco naturales. Recordemos que es una adaptación libre del radioteatro de Chiappe. La narración no adapta el lenguaje a lo cinematográfico, continúa con su impronta. Esta superposición de códigos la vuelve muy extraña.
La protagonista es Griselda, una adolescente que encarna la representación idealizada y casi racista de la femineidad. Rubia, blanca, impoluta. Va vestida de blanco a arar campos, entre otras particularidades. Se la ve ingenua pero muy enamorada.
Hay una sensualidad muy presente en la película. La relación de los protagonistas esta dominada por la Naturaleza. Vemos el bosque, el mar, las piedras, una cascada. Todo esta inundado del amor que sienten Nazareno y Griselda. Esa misma naturaleza que los va a separar.
En cuanto a lo formal, es reiterativo y muy hermoso el uso de TRAVELLINGS SEMICIRCULARES. Dice Favio, no sé si es cierto, que él hizo fabricar las vías, ya que aquí solo se hacían travellings derechos.
También es interesante la experimentación formal: todos los recursos están maximizados, llevados al límite. El artificio siempre esta a la vista. Se utilizan cámaras super lentas, focos selectivos, filmaciones debajo del agua, filtros que convierten el día en noche (la famosa “noche americana”). La verosimilitud esta forzada en muchos momentos, el artificio del cine esta presente, desde esos travellings semicirculares de presentación de la protagonista, como en la escena que aparecen sobreimpresos al fuego, a las noches americanas.
Alfredo Alcón es el MAL. El infierno es dantesco, sin duda. Hablan en latín, que también es el idioma de la Iglesia Católica. Hay mucho de El Bosco en esa representación del infierno.
La profesora Norma Porta dice: “Nazareno es tentado por el Diablo, sin embargo no es un endemoniado, al contrario, su mutación zoomórfica se produce porque rechaza las riquezas y elige el amor. Esto lo redime y lo lleva a una muerte sacrificial. El mismo Diablo está humanizado, envidia la suerte de Nazareno capaz de la entrega amorosa total, hasta tal punto está cansado de su suerte que pide al joven que interceda por él ante Dios, el mayor dolor y castigo es su incapacidad de amar”.
La licantropía y los relatos de transformación del hombre en bestia han ido unidos a la historia y la leyenda de los pueblos y han sido interpretados como el miedo social e individual a la desviación de la norma: la posibilidad de que el hombre deje salir la bestia interna que se apodere de su raciocinio y lo lleve a un estado primitivo.
Imágenes de El Séptimo Sello, de Igmar Bergman
Imagen de Nazareno...
1 comentario:
Gente està lindo el blog, lo visito con frecuencia. Pero le falta un calendario de eventos, asi uno va previendo la agenda. Agreguen las proximas actividades al costado. Graciass
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